sábado, 2 de mayo de 2009

La elegancia del erizo

Y aquí ha ido a posarse el marcapáginas caprichoso. El libro fue un regalo, y reconozco que ha sido un verdadero placer poder leerlo.
Muriel Barbery, la escritora, maneja con maestría el lenguaje, y nos introduce con una delicadeza sorprendente en el número 7 de la calle Grenelle, donde una niña superdotada y una portera con sensibilidad artística conviven sin conocerse.
Poco a poco, y combinando las reflexiones de ambas, asistimos a un verdadero canto a la vida y al arte. Las pinceladas de la cultura japonesa son frecuentes, también, en este libro.
Es uno de esos libros, uno de esos que empiezas sin saber muy bien a qué te enfrentas y, conforme te vas sumergiendo en sus páginas, descubres que has cogido cariño a cada uno de sus personajes y que no puedes abandonarlo hasta el final. Final que, por cierto, me arrancó alguna que otra lagrimilla.
En definitiva, altamente recomendable. La mejor adquisición del 2009, por el momento, y una auténtica joya que guardaré en mi estantería. Y pienso que cualquier enamorado de la literatura podrá disfrutarlo con la misma emoción.
Eso es todo. Mi marcapáginas duerme la siesta; esta noche le toca mudarse a otra novela.

5 comentarios:

  1. He llegado aquí desde tu otro blog, y al mismo desde Whisper of the Heart a quien debo agradecer el haberte encontrado.

    Este rinconcillo promete y ya me lo estoy apuntando a mi lista de visitas. Muchos ánimos y, por cierto, definitivamente voy a tener que hacerme con este libro.

    ResponderEliminar
  2. Vaya vaya, otro blog... ;) Bien por ti.
    El libro del que hablas, sencillamente delicioso. Comparto especialmente lo de que la autora maneja con maestría el lenguaje. Recuerdo que cuando lo leí pensé que me encantaría leerlo en el idioma original... una pena que mi francés no de para tanto. Te seguiré por aquí también.
    Bicos

    ResponderEliminar
  3. Gracias a las dos :) es un placer teneros por aquí.

    Besos

    ResponderEliminar
  4. Es extraño... peo ese libro ha estado en mis manos muchas veces y siempre ha habido algún extraño motivo por el que no me lo he comprado. ¿La última vez que ocurrió? El lunes pasado, pero las prisas y dos libros en cola me "obligaron" a dejarlo otra vez en la estantería de la librería. Después de leer tu entrada, puede que esa haya sido la última vez.

    ResponderEliminar
  5. Comprpe el libro, voy a la mitad y no lo puedo dejar, gracias por la recomendación

    ResponderEliminar

UA-11417039-1